Mientras se desarrollaba la implementacion de la copa de leche, surgió la posibilidad de “cambiar” esa copa de leche por un proyecto distinto, tanto en dificultad como novedoso: el “Yogurito escolar”. Este yogur es distinto al comúnmente comercializado por contener cepas probióticas.
Es de destacar que en el país no había un yogurt a base de probióticos con apoyo científico y prueba de campo. En este caso, en una primera etapa (año 2007) se evaluó el efecto de la administración de los probióticos en la salud de unos 300 niños de 2 a 6 años de edad, concurrentes a comedores comunitarios del Gran San Miguel de Tucumán, trabajo realizado en conjunto con el CERELA (Centro de Referencia de Lactobacilos) perteneciente a la Universidad Nacional de Tucumán (UNT). El estudio fue parcialmente subvencionado por el Ministerio de Ciencia y Tecnología de la Nación, el CONICET y el Gobierno de Tucumán. En este proyecto participaron unas 150 personas entre investigadores, técnicos, becarios, profesionales de la salud (médicos, nutricionistas, asistentes sociales) y estudiantes de Nutrición, además de los responsables de los cuatro comedores donde se llevó a cabo la experiencia.
La experiencia de campo abarcó a la mitad de los comedores a los que se proveyó con yogurcito con probióticos; y a la otra mitad, un yogur placebo (idéntico al anterior pero sin la cepa probiótica CRL 1505). A todos los niños se les hacía un seguimiento con un grupo de alumnos de un colegio de Tucumán coordinados por médicos y nutricionistas. Concluida la experiencia de este periodo se comprobó:
Como conclusión general, los resultados obtenidos dieron evidencias claras de beneficios del consumo del alimento con probióticos en la salud de los niños. El aumento de IgA (Inmunoglobulinas “A”) de mucosas estaría asociado al efecto preventivo observado en infecciones respiratorias e intestinales, disminuyendo notablemente la mala salud de los alumnos, reduciendo el ausentismo escolar Estos resultados obtenidos fueron tomados por el Ministerio de Desarrollo Social de la provincia, y a partir del año 2008 se implementó un sistema de trabajo en conjunto con cuatro entidades que hasta la fecha trabajamos mancomunadamente para entregar tres veces a la semana más de 100.000 raciones de yogur con probióticos en las escuelas de menores recursos de la provincia.
La intervención de cada Entidad es la siguiente:
A- Aproleche (Asociación de productores lecheros) aporta la leche de los tambos
B- El Centro de investigación y referencia de lactobacilo (CERELA) aporta las cepas probióticas
C- Cerros Tucumanos (empresa láctea que elabora el “yogurito” escolar)
D- El Ministerio de Desarrollo de la Provincia, que determina los puntos destinos de entrega y gestiona el proyecto.